Blog
6 consejos para estudiar a tu propio ritmo
- 5 de julio de 2022
- Publicado por: Integrademy
- Categoría: Blog
Estudiar en la universidad es muy diferente a hacerlo en el instituto. Como adulto, tienes tu propio horario y responsabilidades que se anteponen al trabajo escolar. Cada estudiante tiene diferentes estilos de aprendizaje, y es importante encontrar lo que funciona mejor para ti para que puedas tener éxito. Si te cuesta seguir el ritmo rápido de las clases o simplemente no puedes dedicar tanto tiempo como los demás, hay formas de estudiar a tu propio ritmo sin sacrificar tu nota. Continúa leyendo para conocer las mejores formas de estudiar a tu propio ritmo en la universidad.
1. Reservar un tiempo cada día para estudiar
A medida que envejeces, empiezas a notar diferencias en la distribución de tu tiempo personal. Quizá descubras que pasas más tiempo leyendo que antes. O puede que descubras que estudiar es una actividad más ocasional de lo que había sido. Sea cual sea el caso, es importante encontrar un tiempo que varíe de un día a otro y que se ajuste a un horario.
Si dedicas demasiado tiempo a cualquier otra cosa, como los videojuegos, el correo electrónico, las redes sociales o la televisión, es probable que descubras que el tiempo de estudio se desperdicia. Por otra parte, si ves que el estudio se apodera de tu vida y te gustaría dedicar más tiempo a otras cosas, hay formas de dedicar menos tiempo al estudio si ves que te cuesta demasiado concentrarte.
2. Establece una rutina regular a la hora de acostarte
Cuando eres estudiante de secundaria, es natural que tengas más tiempo libre del que tendrás en la universidad. Esto es normal, y es normal tener aficiones y actividades extracurriculares que requieren que estés en tu escritorio entre las 6 y las 8 de la tarde. Pero cuando ya eres adulto y has empezado oficialmente tu horario universitario, es fundamental que reserves un tiempo entre las 8 y las 5 de la tarde para no hacer nada más que estudiar.
Al reservar este tiempo, no sólo te aseguras de tener el tiempo para lo que necesitas hacer, sino que también te aseguras de tener la preparación mental y emocional para tener éxito. Si te cuesta conciliar el sueño por la noche, intenta leer algo mientras esperas. Prueba con un libro de Kindle, por ejemplo, ya que ofrece una amplia gama de libros adecuados tanto para leer como para escuchar.
3. No te excedas en el estudio
Como adulto, puede que te des cuenta de que tienes más tiempo libre del que deberías. Por ejemplo, puede que estés investigando el fin de semana o que tengas un trabajo a tiempo completo que te obligue a estar en tu mesa entre las 6 y las 8 de la tarde. Si tienes que investigar durante el fin de semana o tienes tiempo extra en un día en el que probablemente estés en tu escritorio, es importante que lo aproveches al máximo. Por ejemplo, si ves que le das demasiadas vueltas a ciertas situaciones o te preocupas por otras, tómate un tiempo para descansar y haz una pequeña pausa antes de volver a ello con la cabeza más despejada. Si ves que necesitas volver inmediatamente al trabajo después de una breve pausa, organiza una jornada de 16 horas.
4. No tengas miedo de pedir ayuda si tienes dificultades
Como adulto, deberías descubrir que tienes más tiempo para pedir ayuda que cuando estabas en el instituto. De hecho, es posible que cuando estabas en el instituto no pidieras suficiente ayuda, así que es importante que te hagas una idea de cuánta ayuda recibes realmente. Si descubres que hay alguien en tu instituto que tiene una habilidad o un problema que tú no tienes tiempo o energía para abordar, pídele que te ayude. Esto puede parecer una gigantesca sobrecarga, pero podría ser la diferencia en tu éxito en la universidad. A mucha gente le cuesta pedir ayuda, así que es importante buscarla.
5. Establece un horario de estudio regular
Al establecer un horario fijo tienes varios beneficios, si lo haces en tu casa podrás avisar para que nadie te interrumpa y puedas aprovechar al máximo el tiempo que invertirás, al estudiar a tu propio ritmo. Respeta este tiempo y no asumas otros compromisos, además es importante que elijas un lugar donde hacerlo de manera recurrente, así como tener en este espacio todo lo que necesitas al alcance para evitar distracción y que debas pararte para conseguir algún material o insumo.
6. Establece objetivos significativos para ti mismo
Al fin y al cabo, tienes que marcarte objetivos. Las metas son importantes porque te ayudan a visualizar tus objetivos y a hacerlos realidad. También te ayudan a planificar los pasos que tienes que dar para alcanzar tus objetivos. Por ejemplo, si quieres ser más reflexivo y paciente contigo mismo, ponte como objetivo “destinar una X cantidad de horas o aprender un tema especializado en X cantidad de días”. Siendo siempre realista y sin forzarte hacer más de lo posible, esto te puede ayudar a ser más amable contigo y no presionarte.
Reflexión final
Cuando llegue el momento de sentarte en tus primeras clases de la universidad, puede que te encuentres con que no eres capaz de concentrarte. Las distracciones pueden ser muy molestas y pueden hacer que no puedas concentrarte en lo que tienes que hacer para tener éxito, sin embargo, te recomendamos que tomes un tiempo cada día para estar a solas con un libro o ver un poco la televisión, puedes ayudar a mantener tu concentración en la tarea que tienes entre manos. Recuerda que no existe un pase libre para estudiar. Solo tienes que aprovecharlo al máximo para estudiar a tu propio ritmo y con éxito.